*El próximo titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Jiménez Espriú, señaló que la siguiente semana se realizarán mesas de trabajo para analizar este tema.
Lino Calderón
En una maratónica sesión sobre el destino del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), celebrada entre 7 funcionarios de alto nivel del futuro gobierno y pobladores de 17 municipios del oriente del Estado de México encabezados por la resistencia histórica de San Salvador Atenco, reconocen los presentes la ausencia de consulta previa al arranque del proyecto que por ahora sigue construyéndose en Texcoco.
Ahora "quieren consultarnos, fuera de tiempo, fuera de la ley" reclamó Felipe Álvarez, poblador de Atenco, en relación al llamado a la población para participar en la consulta ciudadana que se hará sobre el NAIM el 28 de octubre próximo; es decir, en 25 días y cuyos mecanismos aún no se han dado a conocer. "Los estamos diseñando", reconoció el propio Javier Jiménez Espriú, próximo titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en breve entrevista.
Representantes del próximo gobierno identificaron junto con los pobladores de Atenco que el proyecto que originó el NAIM ha tenido omisiones como la ausencia de una consulta a los pueblos originarios afectados, posibles impactos al medio ambiente, e incluso en el terreno económico, "el 70% de lo invertido se ha ido a infraestructura para evitar que el NAIM no se hunda ni se inunde", destacó el futuro subsecretario de Derechos Humanos que se llevó las palmas en el foro abierto en el Club de Periodistas al reconocer que él "prefiere el lago" de Texcoco que el NAIM.
"Tenemos muy claro, este proyecto es un enorme error desde cualquier ámbito que se le vea. Es un error económico, donde una inversión inicial de 169 mil millones de pesos hoy va en 250 mil y la mayor parte de esa inversión, cerca del 70 por ciento, es para que no se hunda y no se inunde el nuevo aeropuerto", agregó Encinas.
Asimismo resaltó errores de planeación del desarrollo urbano, porque el NAIM traerá a la zona metropolitana del Valle de México, "30 millones de personas diez años antes de lo programado", destacó Encinas al enumerar diversas fallas que observa en el proyecto.
Ante la insistencia de los pobladores de 17 municipios de la cuenca y la riviera del Valle de Mexico de cancelar el proyecto, Jiménez Espriú enfatizó que se requiere "consultar a todos para tomar la mejor decisión"; sin embargo, el próximo titular de la SCT anunció que irá a visitar las zonas con mayor impacto ambiental y social a partir de la construcción de la nueva terminal aérea.
Al consultarle a Jiménez Espriú si en el derecho de los pueblos reconocido en México y el mundo, la falta de consulta podría derivar en la cancelación de la obra, el próximo funcionario federal aclaró que él no se puede pronunciar sobre un asunto jurídico. "Es un tema unilateral, ahora sobre el tema de que si uno (no haber realizado la consulta previa) cancela lo otro (el NAIM) es un tema jurídico del cual yo me declaro incompetente", apuntó.
Tras más de tres horas de debate sin tregua ambos aceptaron reconocer a los pueblos originarios como interlocutores de este proceso y que la interlocución "no queda limitada a la consulta, ambos grupos sostendrán reuniones periódicas.
"Nuestro compromiso", dijo Jesús Ramírez vocero del próximo gobierno, es para abordar los diferentes temas de derechos humanos, juicios pendientes, persecuciones, o incluso detenciones ilegales por la resistencia al NAIM.
"En el caso de asesinatos haremos puntual seguimiento y denuncia pública de estos hechos", aseguró Ramírez al destacar que Alejandro Encinas, próximo subsecretario de Derechos Humanos de la SEGOB, dará "seguimiento puntual a estos casos y buscar la intervención incluso legal para, en el caso de persecuciones, de detenciones ilegales que haya, proceder a su liberación o a su exculpación".
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