Por: Noel F. Alvarado
El diputado del PRD Víctor Hugo Lobo Román, propuso a la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum instrumentar a la brevedad un plan de acción para situaciones de emergencia y garantizar el abasto suficiente de combustible a los vehículos oficiales como ambulancias, bomberos, patrullas, de Protección Civil y transporte de perecederos, toda vez que la escasez de gasolina cobró su primera víctima en Gustavo A. Madero.
Al participar en el Foro de Análisis: Problemática por Escasez de Gasolina, el vicecoordinador del partido del sol azteca en el Congreso de la capital del país, denunció que hasta este jueves las pérdidas económicas por la emergencia de desabasto de combustible asciende a más de 39 mil millones de pesos.
Lobo Román dijo que durante los primeros nueve días del presente mes, el gobierno federal importó 43 mil 700 barriles de gasolina que representan 7 millones de litros del combustible, equivalente a lo adquirido en los últimos cinco meses la administración anterior.
El legislador perredista demandó al gobierno federal reducir el precio de la gasolina, pues durante los últimos días se obtuvieron ingresos por más de 80 mil millones de pesos, mismos que podrían ser destinados para ese fin.
Respecto al programa emergente para la Ciudad de México, sostuvo que se trata de una exigencia de población contar con acciones más estructuradas, con un programa de comunicación completo y sobre todo, la garantía de que los servicios de emergencia de esta capital funcionarán aún en situaciones de escasez del combustible como la que se vive.
"La crisis de desabasto dejó al descubierto la falta de operatividad del gobierno, pues durante más de cinco días millones de automovilistas quedaron a merced de la especulación sin que autoridad alguna ofreciera información oportuna respecto a los lugares, estaciones de servicio, horarios y planeación de abastecimiento", expresó.
En estas condiciones, el diputado Lobo Román, consideró que es urgente perfeccionar un plan de acción tendiente a garantizar el abasto oportuno y eficiente de los vehículos oficiales, que previamente deberán portar una identidad gráfica de alta prioridad que les permita dotarse en las estaciones de servicio durante una eventual emergencia.
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