Columna Inversión Turística
Pueblos Mágicos, la valiosa marca que perdió México
Nadia Hernández Soto
Los Pueblos Mágicos son más que nombramientos, significa resaltar la belleza de los rincones de México, destacar frente al mundo sus características que los hacen únicos y representan lo hermoso que es nuestro país, sin embargo el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2019 dejó en ceros ese esquema, es decir; sin recursos para su mantenimiento.
Estas regiones con historia, tradiciones y leyendas atractivas para el turismo que surgieron hace 17 años con ese nombre, estarán en una situación incierta, pues hay que recordar que el secretario de Turismo, Miguel Torruco, meses antes de que tomará el cargo aseguró que se realizaría una modificación al programa, sin embargo ante la falta de claridad de las acciones a seguir, el sector ha alzado la voz, incluso expresa pánico ante su posible desaparición.
Así, con menos o sin presupuesto los Pueblos Mágicos tendrán que sortear su desaparición, pues el mensaje del secretario Torruco es claro "…hacer de la austeridad republicana, creatividad mexicana", en ese tenor, las regiones que antes no tenían prepuesto para señalética, pintura, arreglos de embellecimiento urbano, en este sexenio tendrán que hacer un doble trabajo de creatividad.
Estos pueblos que son mágicos, pero pobres, lo serán aún más; pues en 2015 de acuerdo con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), en 11 Pueblos Mágicos se incrementó la pobreza como Arteaga, en Coahuila, al pasar de 6 mil 340 habitantes en esta situación en 2010, a 9 mil 39 en 2015, es decir, de 25.3% a 41% de su población.
Así como el poblado coahuilense que agudizó su pobreza, paso con Jiquilpan, en Michoacán, que luego de formar parte de los Pueblos Mágicos, pasó de 46.3% a 53.4% entre 2010 y 2015.
Además en el Valle de Toluca, Metepec fue el tercer pueblo donde más subió la pobreza, de 25% a 31.6%. Otros Pueblos Mágicos donde tras recibir el reconocimiento en 2012 creció la pobreza fueron Yuriria, en Guanajuato; Batopilas, en Chihuahua; Loreto, en Baja California Sur; así como Angangueo y Tacámbaro, ambos en Michoacán; y Cholula, Chignahuapan y Pahuatlán, los tres en Puebla.
Ahora con esta nueva administración que encabeza Andrés Manuel López Obrador, los seis millones de personas que viven en esas comunidades entre artesanos, prestadores de servicios, pequeños hoteleros y microempresarios, tendrán que maniobrar en los destinos para "que no se caigan", que si bien no eran visitados (en su mayoría) por turistas extranjeros, con menos recursos es casi nula la posibilidad de que se concentre el turismo internacional en ellos.
Por lo que de nada sirvió, el convenio firmado entre México y Ecuador en octubre pasado, para que el país sudamericano adoptara el exitoso programa mexicano que prometió (en ese mes) extenderse hasta 2021.
México sería asesor de Ecuador para implementar en aquel país el programa "Pueblos Mágicos" con intercambio de experiencias y procedimientos que supone es un modelo de desarrollo de política pública que permite derramar en regiones alejadas de las ciudades.
Sin embargo, ese muy mencionado convenio ya no tendrá efectividad, el hecho de que México se mostrase como ejemplo de política turística con sus vecinos del sur ya no es asunto que le interese al nuevo gobierno, al menos es la señal que manda el secretario de Turismo.
Pareciera que se trata de obedecer órdenes del Ejecutivo y no de las convicciones como empresario turístico de toda la vida que ha sido Torruco Marqués, pues durante la 5° Feria Nacional de los Pueblos Mágicos celebrada en Morelia, Michoacán, se había comprometido a seguir con el impulso a este sector del turismo, así lo confirmó Enrique de la Madrid luego de una reunión previa en la que el actual titular de Sectur aprobaba la inclusión de 10 pueblos más en este 2018.
Y aunque ha reconocido que las regiones Pueblos Mágicos tienen efectividad en el desarrollo de la economía regional, simplemente Torruco responde que no habrá más de estos sitios con esta marca.
Una marca avalada por parte del Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI), que recibió constancia por parte de este organismo como "marca famosa", resultado del trabajo de al menos seis millones de personas que viven en 121 municipios del país que también son mexicanos y subsisten del turismo.
El trabajo de 17 años y exitoso simplemente desaparecerá como una oportunidad para México de mostrarse a América Latina con un modelo de desarrollo con oportunidad de negocio como lo es "Pueblos Mágicos". El hecho de que Ecuador quisiera implementar circuitos turísticos igual a los que hay en nuestro país, no es casualidad, es producto del reconocimiento de las políticas públicas que se hacen bien y no se pueden esfumar para hacer otras.
Los artesanos y pequeños empresarios lo resentirán. No se puede cambiar la vocación de años, de mexicanos que contribuyen con la economía y además muestran lo mejor de México por darle gusto a un ciudadano con investidura.
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