Poe: Noel F. Alvarado
En el marco de la celebración del Día del Criminólogo, el Instituto Nacional de Ciencias Penales (INACIPE) conmemoró el 40 aniversario luctuoso de Alfonso Quiroz Cuarón, abogado, profesor e investigador considerado "el padre de la Criminalística mexicana" y en cuyo honor se nombró al auditorio principal de este recinto académico.
Ante diversas personalidades, estudiantes, catedráticos y público en general, Luis Rodríguez Manzanera, ex presidente de la Sociedad Mexicana de Criminología; Rafael Moreno González, ex presidente de la Academia Mexicana de Criminalística; Sergio García Ramírez, ex presidente de la Academia Mexicana de Ciencias Penales; y José Adrián González Navarro, diputado federal, recordaron experiencias y destacaron la labor científica de quien, coincidieron, "fue maestro de juventudes y forjador de vocaciones".
En su oportunidad, el también profesor emérito de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Sergio García Ramírez, aseguró que el legado teórico de Alfonso Quiroz Cuarón, plasmado en cada uno de sus libros, representa un parteaguas para las ciencias penales, pues gracias a éste el ámbito académico pudo renovarse.
"A él se debe la convicción y el entusiasmo por dotar a México de un organismo como el INACIPE, que ilumine la política penal y responda las grandes preguntas sobre la criminalidad en nuestro país: ¿qué hacer con ella? ¿cómo descifrarla? ¿cuáles son las tareas del Estado al respecto?", reflexionó.
Fue a través de este Instituto que, según García Ramírez, fue posible atender uno de los reclamos más enérgicos del criminalista: formar profesionalmente al personal encargado de la seguridad pública y la justicia penal.
"'La criminalística es hija predilecta de la medicina forense', decía Cuarón, pues ella indaga, busca, interpreta e individualiza objetivamente los indicios para encontrar al delincuente y llevarlo ante la justicia o para liberar al inocente. En él, como en nadie, se percibían ambas esencias: la del criminalista y la del médico forense", recordó en su oportunidad el pionero en el campo de la criminalística mexicana, Rafael Moreno González.
Dicho especialista explico que fue Alfonso Quiroz Cuarón quien, entre otras cosas, fundó el Departamento de Investigaciones Especiales del Banco de México, oficina especializada en la prevención de falsificación de moneda y el uso de dichas réplicas, la cual fue ampliamente reconocida por el desarrollo de numerosas investigaciones dotadas de sólidas herramientas técnicas y teóricas. "Su legado le asegura un espacio en el libro de honor de la historia de las ciencias penales", aseguró Moreno.
Adrián González Navarro, compilador y coordinador del libro "Quiroz Cuarón, 40 aniversario luctuoso", obra editorial de la LXIII Legislatura, indicó que "la irresponsabilidad de los políticos y artífices de las leyes va contra la esencia, de rigor científico, del trabajo de Alfonso Quiroz Cuarón".
Finalmente, Luis Rodríguez Manzanera recordó que el criminalista tenía en repertorio editorial un gran número de obras cuya vigencia teórica es contemporánea, pues salvo la actualización numérica de datos específicos, "el estudio criminológico de nuestros días encuentra sustento en su obra".
"Su trabajo, como el de muy pocos en criminología, contaba con el reconocimiento de las Naciones Unidas. El valor del maestro Cuarón en el medio científico es enorme y su obra literaria da cuenta de ello", concluyó Manzanera.
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