* Llevó a la agraviada a un domicilio con la excusa de que comprarle su mercancía
* Desapoderó a la víctima de dinero y su equipo de telefonía celular
* El indiciado cuenta con dos antecedentes personales negativos por robo a transeúnte y a negocio
* Desapoderó a la víctima de dinero y su equipo de telefonía celular
* El indiciado cuenta con dos antecedentes personales negativos por robo a transeúnte y a negocio
Por Noel F. Alvarado.
Las pruebas presentadas por el agente del Ministerio de la Fiscalía Central de Investigación para la atención de Delitos Sexuales, fueron determinantes para que un Juez de Control vinculara a proceso a un hombre de 40 años de edad, por su probable participación en los delitos de violación y robo agravado, en agravio de una mujer de 21 años de edad, en la delegación Iztapalapa.
En la audiencia inicial, el juzgador le impuso como medida cautelar la prisión preventiva oficiosa en el Reclusorio Preventivo Varonil Norte; además, dio plazo de tres meses para el cierre de investigación.
De acuerdo con la carpeta de investigación, el pasado 20 de abril el imputado se acercó a la agraviada, quien vendía obleas en los alrededores de un parque, y le manifestó el agrado que tenían sus familiares por sus productos, por lo que le pidió que lo acompañara a su casa por dinero, presuntamente para comprarle los dulces.
Una vez en el domicilio, ubicado en la colonia Real del Moral, el hombre entró a un cuarto y le indicó a la afectada que lo esperara en la cocina, donde la víctima colocó su mercancía; instantes después, el agresor la amagó con un cuchillo, la tomó del brazo, le exigió silencio, la llevó a unas escaleras y la desapoderó de su dinero.
Posteriormente, el implicado la ingresó en una de las habitaciones, le quitó un teléfono celular que la víctima guardaba en su ropa, la desnudó y comenzó a agredirla sexualmente. Tras cometer el ilícito la dirigió a otra recámara, donde le amarró los pies y manos, y le cubrió la boca con una bolsa; enseguida, el imputado salió del cuarto.
Después de unos minutos la agraviada no escuchó ruidos, por lo que al sentir que su vida corría peligro, logró desatarse, se vistió y escapó por una ventana, subió al techo de la vivienda y brincó a la casa de al lado, donde pidió ayuda a un vecino, quien solicitó el apoyo de policías preventivos, a quienes le informó lo sucedido.
Los elementos policiales tocaron la puerta de la vivienda del imputado, quien al abrir y percatarse que eran las autoridades, trató de huir; no obstante, después de ser señalado por la mujer, fue capturado.
Derivado de los trabajos de gabinete, campo e inteligencia, implementados por la Policía de Investigación (PDI), se estableció que el imputado cuenta con dos antecedentes personales negativos de carácter penal por los delitos de robo a negocio y transeúnte, ambos con violencia, por los que estuvo en los Reclusorios Preventivos Varonil Norte y Sur.
De las diligencias practicadas por el representante social se obtuvieron las entrevistas de los policías y la denunciante. El área de psicología forense determinó que la víctima presenta alteraciones compatibles con las personas agredidas sexualmente.
De encontrarse penalmente responsables de este ilícito, el probable participante podría alcanzar una sentencia de hasta 20 años de prisión.
La persona mencionada en este comunicado tiene el carácter de imputada y se presume su inocencia hasta que, en su caso, la autoridad jurisdiccional resuelva lo contrario.
Las pruebas presentadas por el agente del Ministerio de la Fiscalía Central de Investigación para la atención de Delitos Sexuales, fueron determinantes para que un Juez de Control vinculara a proceso a un hombre de 40 años de edad, por su probable participación en los delitos de violación y robo agravado, en agravio de una mujer de 21 años de edad, en la delegación Iztapalapa.
En la audiencia inicial, el juzgador le impuso como medida cautelar la prisión preventiva oficiosa en el Reclusorio Preventivo Varonil Norte; además, dio plazo de tres meses para el cierre de investigación.
De acuerdo con la carpeta de investigación, el pasado 20 de abril el imputado se acercó a la agraviada, quien vendía obleas en los alrededores de un parque, y le manifestó el agrado que tenían sus familiares por sus productos, por lo que le pidió que lo acompañara a su casa por dinero, presuntamente para comprarle los dulces.
Una vez en el domicilio, ubicado en la colonia Real del Moral, el hombre entró a un cuarto y le indicó a la afectada que lo esperara en la cocina, donde la víctima colocó su mercancía; instantes después, el agresor la amagó con un cuchillo, la tomó del brazo, le exigió silencio, la llevó a unas escaleras y la desapoderó de su dinero.
Posteriormente, el implicado la ingresó en una de las habitaciones, le quitó un teléfono celular que la víctima guardaba en su ropa, la desnudó y comenzó a agredirla sexualmente. Tras cometer el ilícito la dirigió a otra recámara, donde le amarró los pies y manos, y le cubrió la boca con una bolsa; enseguida, el imputado salió del cuarto.
Después de unos minutos la agraviada no escuchó ruidos, por lo que al sentir que su vida corría peligro, logró desatarse, se vistió y escapó por una ventana, subió al techo de la vivienda y brincó a la casa de al lado, donde pidió ayuda a un vecino, quien solicitó el apoyo de policías preventivos, a quienes le informó lo sucedido.
Los elementos policiales tocaron la puerta de la vivienda del imputado, quien al abrir y percatarse que eran las autoridades, trató de huir; no obstante, después de ser señalado por la mujer, fue capturado.
Derivado de los trabajos de gabinete, campo e inteligencia, implementados por la Policía de Investigación (PDI), se estableció que el imputado cuenta con dos antecedentes personales negativos de carácter penal por los delitos de robo a negocio y transeúnte, ambos con violencia, por los que estuvo en los Reclusorios Preventivos Varonil Norte y Sur.
De las diligencias practicadas por el representante social se obtuvieron las entrevistas de los policías y la denunciante. El área de psicología forense determinó que la víctima presenta alteraciones compatibles con las personas agredidas sexualmente.
De encontrarse penalmente responsables de este ilícito, el probable participante podría alcanzar una sentencia de hasta 20 años de prisión.
La persona mencionada en este comunicado tiene el carácter de imputada y se presume su inocencia hasta que, en su caso, la autoridad jurisdiccional resuelva lo contrario.
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